Por Luis Martínez Alcántara
CIUDAD DE MÉXICO.- La Ley Silla, recientemente aprobada por la Cámara de Diputados, es una reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT) que tiene como propósito garantizar que los trabajadores puedan disfrutar de un descanso en un asiento con respaldo durante su jornada laboral. Esta iniciativa surgió en respuesta a la necesidad de proteger la salud de los empleados, sobre todo en sectores donde se exige pasar largos periodos de pie.
A pesar de haber sido discutida previamente en el Senado, la reforma no prosperó en la Cámara Baja, lo que obligó a replantearla. En esta ocasión, el proyecto fue respaldado por unanimidad. La clave principal de la reforma es que obliga a los empleadores a proporcionar un número suficiente de asientos con respaldo para que los empleados puedan descansar durante su jornada.
La Ley Silla está dirigida principalmente a los sectores de servicios y comercio, aunque también podrá aplicarse en áreas industriales cuando la naturaleza del trabajo lo permita. Un aspecto importante es que la reforma aún debe ser ratificada por el Senado. No obstante, dado el consenso logrado en la Cámara de Diputados, se espera una rápida aprobación.
Una vez oficializada, las empresas tendrán 180 días para adaptar su normativa interna, mientras que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) emitirá las normas correspondientes en un plazo de 30 días.
Uno de los puntos más significativos de esta reforma es su enfoque en la salud de los trabajadores. Estudios han demostrado que estar de pie durante periodos prolongados aumenta el riesgo de padecer problemas de salud graves, como infartos cardíacos o derrames cerebrales. Esto se debe a la falta de circulación sanguínea adecuada, lo que afecta al retorno venoso.
La evidencia clínica señala que permanecer de pie por más de 40 minutos sin descanso puede causar síntomas lumbares severos, lo que resalta la importancia de implementar estas medidas de protección laboral.
Aunque la Ley Silla es una novedad en México, en otros países ya existen regulaciones similares desde hace décadas. España, Chile y Argentina implementaron leyes protectoras para los trabajadores desde principios del siglo XX. En Estados Unidos, incluso se está debatiendo la Ley “Standing is Tiring Act” en Nueva York.