Por Luis Martínez Alcántara
CIUDAD DE MÉXICO.- Jodie Grinham, arquera británica, hizo historia al ganar una medalla de bronce en los Juegos Paralímpicos de 2024, estando embarazada de siete meses. Con esta hazaña, Grinham se convirtió en la primera mujer en estado de gravidez en lograr una presea en esta competición.
Después de haber sufrido tres abortos espontáneos en el pasado, este logro tiene un significado aún más profundo para ella, quien celebró la medalla en la emblemática explanada de los Inválidos, en París. Su triunfo es un testimonio de su habilidad como atleta, de su perseverancia y fuerza ante las adversidades.
Con 31 años, Grinham ya había experimentado el éxito en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro 2016, donde obtuvo una medalla de plata en la categoría de equipo mixto. Sin embargo, este 2024 será un año inolvidable para ella, no solo por su medalla de bronce, sino también porque está a punto de convertirse en madre tras una lucha dolorosa contra la pérdida.
Para ella, la medalla es un símbolo de lo que se puede lograr con tenacidad y preparación, demostrando que ni siquiera un embarazo avanzado es un impedimento para competir al más alto nivel. “He demostrado que todo es posible. Simplemente hay que ir y hacerlo. ¿Quieres hacerlo? Pues hazlo”, sentenció con convicción.
Durante la competencia, Grinham confesó que sentía el movimiento de su bebé, lo que le daba una conexión especial mientras disparaba. Este vínculo no solo la motivaba, sino que la hacía aún más consciente de la importancia de cada tiro, recordándole que estaba compitiendo no solo para ella, sino también para su hijo.
Jodie Grinham envió un mensaje poderoso al mundo: una mujer embarazada puede competir y ganar al más alto nivel. Su hazaña en los Juegos Paralímpicos inspira a otros a creer en sus capacidades y a no limitarse ante las circunstancias.